El pesto es una deliciosa salsa fría que acompaña muy bien cualquier plato de pasta o incluso puede acompañar ensaladas, comerla encima de un pan tostado….

Tiene un sabor muy fresco gracias a su ingrediente principal: la albahaca. La de hojas grandes comestibles y no la que se usa frecuentemente contra mosquitos en las macetas de nuestros balcones o jardines!! A mi juicio la mezcla de esta hoja de color y sabor refrescante junto con el sabor de piñones (o nueces) convierte esta salsa en un manjar con un delicado aroma a verano !! Aunque se come durante todo el año…

El queso utilizado corrientemente es el parmesano porque es más corriente aquí, sin embargo el pecorino es el queso adecuado según la verdadera receta originaria de Génova. Siempre imprescindible un buen aceite de oliva ya que hay que echarle abundante para conservarlo y para hacer cantidad. esta salsa de hecho se conserva muy bien varias semanas incluso gracias al aceite de oliva y al ajo.

Os paso los ingredientes generales pero añadiendo mis propios matices para daros mi propia receta…

 

Ingredientes:

-30 hojas de albahaca

-un buen puñado de piñones(25-30). ya que cuestan caro no hay problema en sustituir los piñones por nueces o almendras.

-100 ml de aceite de oliva ( o más….yo le pongo hasta que cubre la salsa para conservarla en nevera varios días y así tenerla preparada para usar con varias recetas aparte de acompañar la pasta)

-1 diente de ajo. ( yo a veces no le pongo porque la hace más pesada de sabor pero para quién le guste fuerte que añada el ajo)

– queso pecorino (o parmesano)

Lavar las hojas y secarlas bien. Pelar el ajo. Rallar el queso. Os explico la manera rápida: echar todos los ingredientes juntos en un minipimer(menos el queso) y triturar. Cuando se haya hecho una pasta verde, verter en un bol y añadir aceite de oliva hasta cubrir la salsa. Rectificar de sal y añadir el queso rallado al final.

La manera lenta es machacar en un mortero la albahaca junto con el ajo, luego los piñones (o nueces…) y el aceite de oliva. De mientras vas girando la mezcla en el mortero se va amalgamando los ingredientes hasta formar una pasta. Una vez llegado a este punto se vierte en un bol y se añade más aceite de oliva y el queso rallado y se rectifica de sal.

Es una maravilla!! Delizioso!!!

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